La usurpadora
Paola Bracho está casada con Carlos Daniel Bracho, un empresario muy amable, el cual tiene dos hijos de su primer matrimonio, Carlitos y Lisette. Sin embargo, Paola se siente aburrida con su vida como madre y esposa, por eso decide irse a Cancún con su amante, Luciano Alcántara. En Cancún conoce a Paulina Martínez, quien trabaja en el baño de damas de un restaurante elegante. Paola se sorprende por el gran parecido que tiene con ella -son físicamente idénticas-, e intenta convencer a Paulina para que asuma su identidad dentro de su familia, y ella poder escaparse para divertirse con su amante, pero Paulina se niega rotundamente. Durante su viaje y a bordo de un barco casino, Paola conoce a Alessandro Farina, un millonario, que se enamora perdidamente de ella y le propone irse con él a recorrer el mundo. Paola ve esto como un pretexto excelente para irse con Alessandro y obligar a que Paulina la suplante. Paulina cae en la trampa que le tiende Paola y finalmente accede a suplantarla,