Los hombres de Juan de Dios Román Seco, buscaban la segunda medalla consecutiva en unos Juegos Olímpicos, tras el metal de bronce cosechado en Atlanta 96. La derrota en la semifinal ante Suecia (25-32), les impedía luchar por el oro. Yugoslavia, por encima de España en el ranking mundial, fue la rival española en el camino por el bronce, que terminarían ganando los españoles (27-22). El camino no fue fácil, tres victorias (Australia, Eslovenia y Túnez) y dos derrotas (Francia y Suecia) en la fase de clasificación, ante selecciones con una gran reputación. El partido vital, el de cuartos de final, ante Alemania (26-27), fue la inyección de moral para el combinado español en la lucha por la medalla olímpica. Cabe destacar la figura de algunos integrantes de este plantel que dio tantas alegrías al deporte español. Entre ellos, cabe destacar, la figura del ilustre guardameta David Barrufet, Talant Dujshebaev y Urdangarín que se retiró tras la final.