Muy lejos quedan los tiempos en los que la leche era el súperalimento imprescindible en todos los hogares españoles. Fuente de calcio y proteínas, nos decían que si no bebíamos leche no íbamos a crecer… Hoy, las bebidas vegetales de avena, arroz, soja o almendras se abren paso en los supermercados y las granjas ven cómo cada vez se consume menos leche y se paga peor. La industria láctea afirma que cada cual es libre de escoger un producto pero les preocupa, y mucho, las informaciones que circulan por la red sobre los supuestos perjuicios de la leche de vaca, y ofrecen estudios científicos que refutan con evidencias estas afirmaciones. Lo cierto es que en cierta parte del consumidor se han generado dudas sobre qué bebida tomar –leche o vegetal-, y que este fenómeno no es made in Spain; en Estados Unidos el descenso en el consumo de leche también parece imparable.