Los aficionados a la pesca recreativa en el mar han protagonizado a lo largo de este año diversas acciones de protesta contra un real decreto que prepara el gobierno y que impondrá limitaciones a su actividad. El objetivo de la nueva ley es evitar que la pesca recreativa sea una actividad comercial encubierta, es decir, evitar el furtivismo, y asegurar la sostenibilidad de los recursos pesqueros. Pero los pescadores recreativos sienten que se les criminaliza injustamente. Además, los pescadores recreativos de la bahía de Cádiz tienen otro frente abierto: la eventual creación de una reserva marina de interés pesquero entre el Faro de Trafalgar y Sancti Petri, 65.000 hectáreas. Una propuesta de organizaciones ecologistas que la cofradía de pescadores artesanales de Conil de la Frontera ha acogido con entusiasmo. Los pescadores profesionales de Conil acusan a los recreativos de competencia desleal. Y los recreativos aseguran que la cofradía quiere asegurarse un coto privado de pesca. La p