Julia, a pesar de los imprevistos, sigue muy motivada con sacar adelante el taller de Carmen e investiga sobre el pasado del negocio. Sergio tarda más de lo previsto en arreglar las máquinas, un tiempo muy propicio para intentar ganarse el perdón de Julia, y quién sabe si recuperar su relación. Carmen no quiere abandonar Río Muni y, animada por Agustina, tiene una idea para ganar un dinero y poder ayudar a su padre. Pero para llevar a cabo su plan, tiene que cerrar un trato con un socio muy particular.