Marisa Flórez, una de las primeras mujeres fotoperiodistas de España, retrató con su cámara los años convulsos de la Transición. El 14 de febrero de 1978 tomó una imagen icónica de un país que estrenaba democracia. Es una de las miles de instantáneas de esta fotógrafa nacida en León y que desde muy joven se sintió atraída por el mundo de la imagen. A lo largo de su trayectoria -que ha tenido lugar, en su mayor parte, en El País- fotografió las primeras legislaturas del Congreso de los Diputados, desde donde también fue testigo del 23-F. Además, Flórez -que en 1981 obtuvo el Premio Nacional de Periodismo- también inmortalizó atentados terroristas, toros, fútbol y entrevistas a famosos, entre otros temas. En 1996 fue nombrada redactor jefe de fotografía del periódico, cargo desde donde gestionó las imágenes que le llegaban del atentado del 11-M. En sus últimos años en El País fue editora gráfica del periódico. Actualmente se dedica a la enseñanza y al comisariado de exposiciones.
