Candela llega al hospital con una hemorragia tras haber ingerido pastillas para interrumpir su embarazo. Le pide a Vilches que no diga nada a su madre, pero Cruz acaba enterándose. Además, la doctora atiende un caso de una mujer con un dolor en el costado. Lo que ella diagnostica como un cólico nefrítico resulta ser una disección de la aorta. Aunque es un error justificable, Cruz piensa que no ha hecho lo suficiente para detectarlo.