Tantas cosas enseña la vida de las plantas… la predisposición del cuerpo, la mente y el espíritu… Obrar serenamente y con criterio, conocer lo que nos rodea y contarlo generosamente, recordar a Aristóteles y a Teofastro. Cultivos y usos milenarios que subsisten especialmente a través de la narración oral, porque de lo que rebosa el corazón habla la boca de José Cárceles, maestro jubilado y herborista.