Mientras Neala charla con Yolanda y los corsarios, Wan Guld aprovecha para capturar a toda su tribu. Su plan es ofrecérselos a cambio del Cetro Rojo y la Piedra Negra. Por su parte, Atzul, el guerrero jefe de la tribu, se propone utilizar este “fallo” de Neala en la protección de su tribu para someterla a un "juicio por magia". Para ello, le ha dado un collar con un embrujo que le impedirá hablar con sus amigos los animales, con lo que los cocodrilos podrán comérsela y él se convertirá en el nuevo rey de la tribu. Afortunadamente, Albert (que, para entonces, ya se ha enamorado de Neala) logra salvarla en el último momento. Entretanto, en el banquete que celebran Wan Guld y sus soldados, todos terminan durmiéndose. Neala y los corsarios consiguen "recuperar" el Cetro Rojo y la Piedra Negra y, además, se hacen con el Mapa Verde. Ahora que tienen en su poder las tres claves para encontrar el tesoro, continúan su viaje, conscientes de que el hecho de que Wan Guld y Vale