Imma se siente culpable por no haberlo protegido lo suficiente al sospechoso suicida, pero se repone gracias al apoyo de Calogiuri, pero sobre todo Pietro, que la conoce demasiado bien. En el entorno familiar, Valentina ha de separarse de su nueva amiga porque se va a estudiar fuera, y buscará refugio en su abuela, quien la enseñará a cocinar. La investigación de la fiscal avanza hacia el hermano del arquitecto, que emigró a Argentina y no ha regresado hasta ahora para el funeral de su hermano. Pero la verdad final sobre la víctima, el motivo y el autor el crimen serán, cuando menos, sorprendentes.