En el capítulo de hoy conocemos a Rafael, un cordobés que ha trabajado como comercial en Madrid y Barcelona hasta que un día decidió quitarse el traje y montar un negocio en la paradisiaca playa de Caños de Meca (Cádiz). Allí, junto a su pareja, tiene un área de servicio y pernocta de autocaravanas. También descubrimos a Emilio, un diseñador industrial que dejó la vida que tenía en Madrid para dedicarse a lo que es su verdadera pasión: la recreación histórica. Tras el confinamiento, él y su pareja, Elena, se instalaron en Tragacete (Cuenca) y allí montaron un negocio de fabricación de objetos de otras épocas. Finalmente, mostramos un día en la vida de Luz que tras haber sido camarera en Londres y Santiago de Compostela decidió irse a vivir a Irixoa (A Coruña) y solicitar una licencia a la Xunta para cuidar niños en su casa y favorecer la conciliación en el pueblo.