Marcus Cooper Walz competía desde la calle 7. Salió rápido, como siempre, pasando segundo a los 200 metros. Después se acomodó, bajando el ritmo hasta pasar quinto por los 500 y los últimos 250, a algo más de dos segundos del primero. En este último tramo, comenzó a remontar posiciones hasta pasar la meta en primera posición. No entraba en las apuestas de nadie, como mucho un bronce competido según decía el presidente de la Federación balear. Pero Cooper, después de superar un 2015 con malos resultados y malas sensaciones psicológicas, hizo la mejor regata de su vida para conseguir el oro. Cooper consiguió así su primera medalla olímpica. Además, ha conseguido seis medallas mundiales entre 2014 y 2019, y tres europeas de 2018 a 2019. Estará en Tokio 2020 buscando su segunda medalla junto al resto del equipo español en la modalidad de K-4.