Un día después de ganar el oro en 1000 m, llegó la prueba de C1 500. Aquí Cal partía como campeón del mundo y debía además afrontarla de forma diferente técnicamente. La envergadura del español era un punto a favor en cuanto a la potencia con la que se impulsaba sobre el agua, pero sin embargo su peso ralentizaba el inicio de su salida y sobre la distancia del medio kilómetro tenía menos tiempo para recuperarse. Pese a que esa mañana el despertador no le sonó para ir a entrenar, en el canal de regatas no se despistó: Opalev tomó rápida ventaja mientras David y Dittmer se ‘enzarzaron’ en una lucha por la segunda plaza. Sin embargo, pronto se convirtió en una batalla por el oro ya que Opalev flaqueó. A diferencia de la final de 1000m, esta vez el que entró primero en meta fue Dittmer y Cal fue plata. Cal es el deportista español más laureado de los Juegos, consiguió en total cinco medallas en sus tres participaciones: oro y plata en Atenas 2004, dos platas en Pekín 2008 y una plata en Lo