En la casa de Mateo en Cafarnaúm, Jesús responde a las preguntas de los fariseos. Samuel le hace una petición a Nicodemo sobre una profecía falsa. Al enterarse de que Mateo se fue, el pretor Quinto emite un decreto contra las reuniones religiosas fuera de las sinagogas. Jesús va a la casa de Simón y cura a su suegra enferma. Nicodemo deja dinero a Jesús y sus discípulos y llora por no atreverse a ir con ellos. En el camino, Jesús decide pasar por Samaria, para sorpresa de sus discípulos y, cuando llegan a Sicar, los discípulos van al pueblo a comprar comida mientras Jesús se queda Jesús se queda en el pozo de Jacob, donde se encuentra con Fotina una mujer rota por el sufrimiento, y le pide agua. Más tarde él le confesará que es El Mesías.