Las viudas españolas son un colectivo invisible donde hoy más que nunca hay soledad y pobreza porque si la situación económica es terrible para muchas familias, en el caso de algunas viudas roza ya el desastre más absoluto. Especialmente mal lo tienen aquellas viudas mayores de 65 años que no llegaron a cotizar a la Seguridad Social y que subsisten con pensiones que, en muchos casos, no alcanzan ni los 400 euros mensuales.