El mundo entero conoce en estos momentos un pequeño pueblo español. Se trata de la localidad zaragozana de Borja y todo a raíz del particular repinte de un eccehomo realizado por Cecilia Giménez. Han pasado ya muchas semanas desde que la noticia se destapara y miles de personas colapsaran el Santuario de la Misericordia para contemplar la nueva versión del fresco. Pero lo curioso de este fenómeno es que ha ido creciendo con el tiempo, a Borja siguen llegando visitantes y crece también el interés comercial por sacar partido a esta historia.