Son cientos, miles, los edificios altos, acristalados, herméticos y llenos de oficinas que plagan nuestras ciudades…templos modernos que albergan a miles de trabajadores y usuarios cada día; emblemas arquitectónicos que incluso dan fama a una ciudad…pero pocos se preguntan si esconden algún peligro oculto…La lipoatrofia semicircular y las afecciones respiratorias son los principales daños del mal diseño de edificios de oficinas. La mala ventilación y el polvo ambiental, principales causantes. Hay que controlar la electricidad estática y la humedad en el ambiente.