La guerra, las dificultades económicas y la inseguridad, están detrás de la avalancha migratoria procedente de distintos países africanos, que arriba a nuestras costas. La ruta con destino a las Islas Canarias, ha aumentado hasta prácticamente colapsar la capacidad de respuesta de emergencia. Para evitarlo, el Ministerio de Migraciones ha puesto en marcha un plan mediante el cual se ha dado traslado a la península a gran parte de estos jóvenes, la mayoría hombres. Bajo la tutela de diversas organizaciones no gubernamentales, se les ha trasladado a pueblos y ciudades donde se han habilitado hoteles, o recintos oficiales para acogerlos. A Malpartida de Cáceres llegaron 140 de estos muchachos custodiados por la ONG Accem. Según el alcalde, Alfredo Aguilera, nadie había avisado al consistorio de su llegada, ni del tiempo previsto de permanencia. Para este pueblo de 4.000 habitantes, ha resultado sorpresivo e inqui