Los agricultores de Murcia viven pendientes del cielo, a la caza y captura de unas misteriosas avionetas que, según dicen, “no dejan llover”. La región ha registrado este año la pluviometría más baja que se conoce. Manolo ha tenido que arrancar el 100% de los almendros a causa de la sequía, una cuarta parte del secano murciano ha muerto. En el campo están convencidos de que alguien hace desaparecer las nubes con yoduro de plata para que no llegue el agua a sus tierras