La venta directa o 'a puerta fría' es una estrategia comercial para conseguir clientes, fieles o socios de forma inmediata, mediante la interpelación directa, ya sea llamando a la puerta de un domicilio, por teléfono o parando a la gente en la calle. Habitualmente se trataba de una ocupación a tiempo parcial, como complemento de un salario principal, pero la crisis y el paro han cambiado las tornas. Muchas de esas personas sobreviven ahora gracias a esos pequeños ingresos. Se calcula que en España unas 60.000 personas trabajan en ventas de este tipo.Una de las cuestiones más demandadas por las empresas es que sus vendedores cuenten con una red social amplia. De este modo, si los empleados tienen un entorno amplio, podrán empezar consiguiendo sus primeros clientes.La competencia en estos nuevos escenarios también es grande. Empresas, ONG's y organizaciones religiosas depuran sus técnicas de acercamiento, de venta o de diálogo directo. Repor asiste a una clase de la comunidad mormona en