Metrópolis dedica su programa de esta noche a un subgénero de la producción audiovisual, el documental ficticio. Cada vez nos es más difícil discernir entre la ficción y la realidad. La información siempre ha sido manipulable. Con las nuevas tecnologías lo es también la imagen real. Fotografías y cintas de vídeo ya no son consideradas como pruebas incontestables. Sin embargo, la mayoría de la gente da por sentado que lo que vemos en televisión es la realidad y, por consiguiente, la verdad absoluta. Esta es precisamente la preocupación de varios autores de documentales ficticios, lejos de querer engañar al público le quieren llamar la atención sobre el posible engaño al que está siendo sometido.