Alfonso Henriques, armado caballero en la catedral de Zamora, logra vencer a su madre, que se refugia en Tuy. Más adelante conquista Lisboa y en pocas décadas se cierra la frontera con España tras la conquista portuguesa del Algarbe. Las alianzas matrimoniales abren unas ambiciones que no llegan a su culminación por la ocupación de Toro y Zamora por el rey castellano.