La capital económica de Ecuador fue fundada por Francisco de Orellana, el gran explorador del Amazonas, para satisfacer la necesidad de Quito de tener un puerto para su territorio.Su barrio más bohemio, Las Peñas, es una de las pocas zonas de la ciudad colonial que ha sobrevivido a los sucesivos fuegos y epidemias que han asolado la ciudad. Hoy la ciudad mantiene con España una relación marcada por el intercambio económico, con sus exportaciones de camarón.