Tras los últimos acontecimientos, Carmen necesita un momento de sosiego¿ Y ahí está Enrique. El testamento de Rafael contiene una sorpresa: por deseo del matador, Julia se convierte en heredera de parte de su fortuna, lo que no hace sino alimentar los recelos de Bernardo sobre su paternidad. Otra disposición del testamento originará un agrio conflicto entre Teresa y Carmen, del que ésta sabrá sacar partido.