Un equipo de En Portada ha entrado en el Polígono, una zona de la estepa donde los soviéticos detonaron cerca de 500 bombas atómicas desde finales de los años 40. Muchas de esas pruebas formaron nubes radiactivas y durante décadas las autoridades ocultaron el daño que producían en la población. Hoy los índices de algunas enfermedades están muy por encima de la media del país. Una de esas víctimas es Berik. Su madre le expuso a la radiación durante el embarazo y poco después de nacer los tumores le cegaron para siempre. A través de su historia, En Portada recorre una región que durante 40 años fue un inmenso laboratorio nuclear. Más información y contenido extra.Hijos de la guerra atómica ha sido galardonado con la