En Africa, en uno de los continentes con mayores reservas de agua, cada vez hay más personas y animales que se mueren de sed. Los países sub saharianos sufren una desertización galopante que destruye los cultivos y hace que la tierra sea más improductiva. Como consecuencia, aumenta el hambre y la pobreza, así como la emigración a países vecinos y a Europa. Un equipo del programa viajó en 2008 a Burkina Faso para comprobar sobre el terreno los primeros efectos del cambio climático