El land stewardship o custodia del territorio es una apuesta real de corresponsabilidad medioambiental entre propietarios y usuarios de un paisaje. Son actuaciones de defensa de espacios de gran valor medioambiental y, al tiempo, de restauración de paisajes degradados. En Estados Unidos o Gran Bretaña llevan más de 25 años trabajando de mutuo acuerdo entidades y personas vinculadas a la custodia para defender la biodiversidad de un territorio, la riqueza de sus hábitats y la preservación de los ecosistemas.