El desmayo que sufrió hace unos días Herminia trae a los Alcántara por la calle de la amargura. La abuela se pasa el día de un humor de perros pensando en comida, y es que el médico le ha ordenado seguir una dieta muy estricta. Por su parte, Mercedes se siente culpable de no haberse dado cuenta antes de los problemas de salud de su madre. Además, en el trabajo las cosas le van de mal en peor. Los acreedores la acosan y, si no consigue dinero enseguida, verá embargadas las máquinas de costura.  Mercedes busca la ayuda de Antonio, que está absolutamente volcado en su nuevo trabajo en Exposov. Tanto, que hasta está aprendiendo ruso con Don Pablo. Y no es para menos, ya que está a punto de visitarles un alto funcionario soviético para tratar de negocios.En la obra, Jacinto tiene un grave problema personal y Tony, que quiere ganarse de una vez el respeto de sus compañeros, no dudará en ofrecerle su ayuda.A principios de los setenta llegaron nuevos aires educativos a las escuelas. Entre  otr