Desde una lata de bebida, el coche que se envía al desguace, el cobre escondido en la electricidad de las casas o un viejo ordenador. Todo ello contiene metales que se pueden recuperar y reciclar infinidad de veces, ahorrando consumo energético. Cuando el hierro, el aluminio o el cobre se funden, su vida empieza de nuevo. Existe hay una minería distinta, una mina urbana que está en los vertederos, en las chatarrerías o en las plantas donde tratan los residuos eléctricos y electrónicos. La basura de los aparatos que funcionan con pilas o electricidad, es la que crece más rápido, la más deseada por los traficantes ilegales de residuos y la más difícil de reciclar, porque contiene materias primas críticas en cantidades microscópicas. En un teléfono móvil puede haber más de 50 elementos de la tabla periódica. Algunos, como el indio, son extraños en la naturaleza. Su producción no supera las 800 toneladas, para todos los móviles del mundo, casi tantos como personas hay en el planeta. Tambié