Pueden ser más de 100.000 las personas que en España padecen simultáneamente problemas de vista y oído. De ellas, se estima que 7.000 pueden considerarse sordociegas, tienen una elevada o total pérdida de ambos sentidos, lo que las convierte en personas altamente dependientes. Su contacto con el mundo se realiza fundamentalmente a través del tacto, pero el tacto aporta una parte mínima de información sobre el entorno, por ello deben contar con el apoyo de profesionales de comunicación, de guías-intérprete o mediadores, sin ellos vivirían aislados, apartados de la sociedad, sin acceso a la formación, a la información o a la cultura.