Estamos en plena cuenta atrás para saber si la puerta de Altamira se abrirá de nuevo a los visitantes o si permanecerá cerrada como hasta ahora. Los científicos acopian estas semanas los últimos datos que van a ser muy importantes para tomar la decisión. Un equipo de Crónicas ha recogido las impresiones y el trabajo de esos investigadores y también se ha acercado a los del CSIC que en 2002 recomendaron el cierre por la gran cantidad de bacterias que había colonizado el techo de policromos.