Pagar por dormir en una casa particular en vez de en un hotel, compartir los gastos de gasolina para no alquilar un coche, permutar un piso por una vivienda más grande para finiquitar la hipoteca. En España medio millar de empresas ofrece propuestas de economía colaborativa. El trueque como posibilidad de ahorro, como fórmula para darle otra vida a lo que ya no usamos y, también, como posibilidad de ganar dinero. Compartir en vez de comprar, una tendencia de consumo que va a más, que mueve miles de millones de euros, que está poniendo en jaque a algunos empresas tradicionales y que en España carece de un marco legal.