Cada vez hay más sustitutos del azúcar. Las estanterías de los supermercados y nuestra despensa se están llenando de panela, fructosa, agave, miel, estevia. Son los nuevos endulzantes, a los que la industria ha colgado la etiqueta de saludables. ¿Son tan buenos como nos venden? ¿Qué son, cómo se elaboran? ¿Tienen menos calorías que el azúcar? ¿Hay alternativas saludables al azúcar?