A través del archivo de RTVE el espectador descubrirá cómo se vivió la revolución musical de las máquinas al mezclarse con el pop más descarado. El tecnopop llegó a España con retraso, pero se cogió con ganas y nos pusimos al día con el futuro bastante rápido. Fue a principios de los ochenta cuando esto empezó a llenarse de cables, sintetizadores, cajas de ritmos… y criaturas orgánicas y racionales dispuestas a sacarles partido.