Nadie escapa a las luchas de poder: desde Crystal hasta Erica de bajo rango, cada lémur tiene que luchar para mantener su lugar en la tropa. Los bebés ahora tienen dos meses. Tommy, el hijo de Crystal, aprende que la vida no siempre es fácil en la cima, como hombre, pronto bajará de rango; en esta sociedad dirigida por mujeres, nunca heredará el estatus de su madre. Un lémur que tiene buenas posibilidades de convertirse en reina algún día es Maya, hija de Kati, líder de la banda del museo. Zak, hijo de Sara, lo tiene más difícil: nació dos meses detrás del resto. Desde aprender qué comer hasta hacer amigos, formar alianzas y establecer su propio lugar en las tropas, la vida para los bebés de Lemur Island es tan dura como lo es para los adultos.