Por su parte, Teresa se queda de piedra al descubrir, por una indiscreción de doña Lourdes, que Ana está embarazada. Cristina, después de hablar con Diana para saber qué tipo de relación mantiene con Salvador, sorprende a Abel mostrándose más sensual que nunca. Teresa se vuelca en recuperar su amistad con Ana: ha visto dudas en ella, y Teresa no tiene la intención de dejarla que aborte. Héctor sin embargo no se lo toma tan a buenas como Teresa porque es el hijo del que provocó la muerte del suyo. Parece que la pareja que forman Abel y Cristina inicia una nueva etapa en su relación. Pero Cristina se preocupa porque Salvador no la llama para comentarle la novela.