Encarna advierte a Ramón de que su aventura amorosa con Julieta les puede costar muy caro, sobre todo porque parece que Marta les ha pillado con las manos en la masa. Marta, en un principio, se hace la dócil e ignorante pero deja claro a Encarna que ella no es tan tonta como creen y no va a quedarse de brazos cruzados. La situación entre José María y Valentina se tensa porque aquel, cansado de las amenazas de Valentina, no acepta que se lleve un vestido de novia de los Almacenes para su sobrina. Héctor está harto de encargarse de tareas insignificantes en comisaría y Ovidio le aclara que se las ordena por su bien, ya que existen rumores que señalan que el asesino psicópata puede ser un policía. Héctor se desahoga tomando copas en el Morocco y charlando con Pablo. Carmen, además de conocer la realidad sobre las heridas en la cara de Alfonso, descubre que la carta radiofónica de amor fue escrita por Simón.