Ramón comprende que la táctica empleada por José María con el perfumista marroquí ha sido equivocada y Ana descubre que su familia quiere comprar el local a cualquier precio. Pelayo trata de mostrarse animado ante Enriqueta aunque se derrumba ante Sole. Juanito el Chico, avergonzado por la borrachera de la noche anterior, empieza a trabajar como vigilante nocturno. Julieta se queda sin droga y comienza a padecer los efectos del síndrome de abstinencia. Los empleados del Morocco están cada vez más preocupados por ella. Ramón Rivas descubre que Julieta es adicta y le niega su ayuda, arremetiendo contra ella y su falta de voluntad.