Marta finge estar borracha para que los Rivas la dejen en paz, pero en realidad ha quedado con Ana para ir al despacho de Héctor. Ana y Marta, como víctimas de los engaños de los Rivas, deciden aliarse para descubrir toda la verdad. Ovidio visita a Juanito Grande, deseoso de hablar de Lázaro pero Juanito alega que no lo conoce. Juanito quiere entregar al niño salvaje a la Beneficencia y Sole le pide una semana más. Ana no puede hablar con Alfonso porque va con su madre y a él le duele el comportamiento tan variable de ella. José María acaba siendo despedido por Ramón Rivas, ya que involuntariamente se inculpa del anónimo que Ramón recibió sobre los encuentros de Ana con sus supuestos amantes en los Almacenes. Mendoza, después de utilizar infructuosamente varias tácticas para que Mario hable y diga los nombres de las personas que visitaron a Andrea en la casa de citas, decide mantenerlo en la cárcel.