Mario, Alicia, Álvaro y Marcelino están muy preocupados por la inminente ejecución de Fernando, aunque mantienen la esperanza de que el Papa pida clemencia a Franco. Marcelino se encuentra entre dos aguas pues tiene que apaciguar a Mario haciéndole creer que Andrea está viajando hacia París y acaba confesándole la verdad a Manolita. Héctor simula aceptar dinero a cambio de alejarse de Ana, pero Ramón pretende cerrar el trato. Ana está absolutamente desbordada tras la explicación de Héctor sobre su madre y busca refugio en casa de Teresa. Carmen la recibe con afecto y le pide a Alfonso que la acompañe a casa. Cuando llega, Ramón estalla al verla acompañada por Alfonso y le cuenta a Encarna que su hija está liada con Héctor. Lázaro finge que no puede hacer el amor con Julieta, pero ésta se muestra comprensiva y los dos intercambian confidencias, lo que les une más.