Ana confiesa a su padre que Héctor es su amante a fin de evitar que él sospeche el motivo por el que está en el despacho del detective. Ramón y Ana se atacan con recriminaciones mutuas hasta que Encarna logra apaciguar los ánimos. Mientras, Ramón visita a Héctor y le ofrece dinero para alejarse de su hija. Pascual ha encontrado a Simón acuchillado en el suelo. Pelayo le realiza una primera cura y Alfonso imprevisiblemente es quién le ayuda a ir a casa. Carmen le efectúa una cura más cuidadosa, y trata de darle unos puntos a la herida pero desiste porque las palabras de Simón confesándole que la quiere la descontrolan totalmente. Lázaro sigue ganando terreno con Julieta. Fernando recibe las visitas en la cárcel de Mario y de Álvaro. Tanto el uno como el otro, le llevan mensajes de ánimo y esperanza, pero Fernando se muestra conforme con su destino, y le pide a Mario que transmita a Andrea su deseo de que no intervenga en ninguna acción para salvarle.