El barrio orquesta un plan para alejar a don Senén de la parroquia y dejar vía libre a Ángel para que pueda casar a Álvaro y Alicia. Juanito el Chico reconoce al hombre que Manolita vio salir la víspera de la joyería y le identifica como a un enfermero con acceso a todo tipo de fármacos que vende pomadas y medicinas bajo cuerda por los prostíbulos. Manzanares, tras demorarlo al máximo, se ve en la obligación de comunicar a Hipólito sus sospechas de que Alicia se refugió en casa de Álvaro tras su huida. Hipólito irrumpe en casa de Álvaro pero no logra dar con ella. Doña Marcela, involuntariamente, le pone tras la pista de lo que va a ocurrir. Ángel descubre el plan para casar a Alicia y se niega a participar en él. Tras hablar a solas con Álvaro y Alicia, y ante la inminencia de la llegada de Hipólito a la iglesia, decide actuar.