Andrea, destrozada por la noticia de la muerte de su hijo, regresa a casa de sus padres. A pesar de los riesgos, ella y Elpidia visitan a Antonio en pleno día, y le cuentan la noticia. Antonio demuestra una gran entereza y es capaz de dar fuerzas a su madre y a su esposa para seguir adelante. Paralelamente, descubrimos que la muerte de Liberto no es más que un embuste de Don Fabián para evitar la vergüenza a la familia. En realidad, el hijo de Andrea está vivo y sano, al cuidado de unas monjas que le han bautizado con otro nombre¿Mientras tanto, la intervención de Paloma precipita los acontecimientos. Paloma, más pragmática que Andrea y Elpidia, comprende que la sentencia a muerte de Villegas acabará desenmascarando a Antonio, y proporciona a éste el dinero suficiente para huir del país. Pero hay algo con lo que ni Paloma ni nadie cuenta: Antonio no es capaz de dejar que Villegas corra la suerte que le co