Mientras Águila Roja sigue investigando sobre sus orígenes, la Villa se ve azotada por una serie de asesinatos. Varias mujeres aparecen desangradas por una extraña herida en el cuello. Margarita se convierte en el blanco de este siniestro asesino, mientras que Sátur desconfía de su amigo Cipri cuando todos los indicios apuntan al posadero como posible autor de la muerte de una prostituta. Mientras tanto, la Marquesa de Santillana se enfrenta al hecho de que su cuñado, el conde de Lizana, quiere despojarla de todas sus posesiones para cedérselas a Nuño cuando éste alcance la mayoría de edad.