La policía saca el cadáver de Jimeno Batán de la iglesia, todo apunta a un suicidio. Ramón retoma de nuevo sus obligaciones y entra en la habitación de Trini que estaba intacta desde su fallecimiento. Carmen hace partícipe a Cesáreo de sus sospechas, parece que su Samuel anda metido en asuntos turbios. Felipe por decisión de Lucía otorga poderes a Telmo para gestionar la fundación. Telmo es llevado a comisaria como sospechoso del asesinato de Jimeno. Ramón es consciente de que Celia está obsesionada con Milagros y por eso no le quita ojo, lo que enerva sobremanera a su vecina, que no es capaz de responder a las preguntas que le hace. Íñigo agradece a Leonor, todo lo que ha hecho por él, Tito rompe el momento romántico con una noticia urgente.