Víctor y Servando gastan una inocentada a Casilda. Ella, triste, se queda dormida y tiene una ensoñación muy especial. Felipe va a insistir para que solucionen los problemas del Hoyo. Guerra va a casa de Felipe y flirtea con Celia mientras su marido no aparece. Úrsula advierte a Cayetana de que Mateo está por la ciudad.