Lolita llega a su casa justo en el momento en el que Antoñito sucumbe a la seducción de Natalia y cae al suelo sin conocimiento. Aurelio felicita a su hermana por haber destruido el matrimonio de Antoñito y Lolita. Pero Natalia no está nada orgullosa de sus actos. Ramón y Liberto intentan convencer a Felipe que cese su guerra contra Genoveva después del escándalo que dio en la calle. Pero el abogado no les escucha. Los Olmedo se las prometen felices y sueñan con su vida tras el robo de la sucursal bancaria. Por la falta de prudencia de Bellita, Liberto está a punto de descubrir que sigue viva la folclórica. Lolita es trasladada al hospital, su pronóstico es incierto. Servando se deja agasajar por la tía Benigna y la prima Indalecia sospecha de sus intenciones. Méndez comunica a Felipe que le ha llegado la orden de frenar las investigaciones por la muerte de Velasco. Y Casilda, animada por Liberto, habla con el abogado: quizás haya llegado el momento de pasar página.