Este invierno grandes nevadas están azotando Moscú. Una de las noches nevó el equivalente a lo habitual en un mes. Pero eso no interrumpe el ritmo de vida de la capital: Moscú no se queda paralizada como Madrid o Nueva York. Abriéndose paso entre la nieve, Erick sale a las calles para averiguar cómo lucha Moscú contra los elementos y a dónde va a parar la nieve de las calzadas y las aceras.