Gisleno Latorre lleva 30 años coleccionando máquinas de fotos y últimamente temas relacionados con la estereoscopía (cualquier técnica capaz de recoger información visual tridimensional). Le encantan los mercadillos y las antigüedades y es en estos lugares donde ha conseguido la mayoría de sus máquinas de fotos.
Aitor Calleja construye y restaura gigantes y cabezudos desde los 17 años. Una afición que comenzó cuando tenía 3 años y que le ha permitido mezclar dos de sus aficiones: la escultura y los gigantes.
Ubaldo Marco lleva 40 años haciendo maquetas y entre otras muchas, posee una de 200 mts2 de trenes que posiblemente sea la más grande de Europa modulada.