Harta de los desplantes de César, Be reclama al reportero poder participar directamente en la investigación. En vista del poco interés que siente el reportero por lo que el considera una intromisión, Be le presiona amenazándle con contarle a Isabel los desmesurados gastos en los que incurre el periodista. Mientras, Alicia y Noelia siguen con sus argucias para echar a Chali de la revista y hacerse ellas con el poder. Gracias a Be, Alicia descubre los negocios sucios del banquero italiano por lo que le pedirá a Noelia que robe los documentos incriminatorios y se los lleve inmediatamente.